Segundo Objetivo de Desarrollo Sostenible: Hambre Cero

CEU Andalucía apuesta cada semana por uno de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible  

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SEVILLA (2020.03.31). CEU Andalucía lleva adelante la iniciativa: “Los ODS, 17 objetivos – 17 semanas en CEU Andalucía”. Con ello, se ahonda en cada uno de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible – ODS, vinculados a la Agenda 2030. En esta semana se plantea el segundo de los ODS, Hambre Cero. Los ODS suponen una llamada de atención a todos para hacer posible un mundo mejor, para que se impulsen acciones e iniciativas que ayuden a mejorar la salud y el bienestar, la apuesta por una educación de calidad, el trabajo en condiciones favorables y el crecimiento económico, la reducción de las desigualdades, el consumo responsable… Cada objetivo se irá desarrollando a lo largo de las próximas semanas.  

Junto con la finalidad y objetivos del número 2 de los ODS, dedicado al “Hambre Cero”, se indican algunos aspectos relacionados con iniciativas de CEU Andalucía vinculadas a ello, también se ofrecen algunas reflexiones del Papa Francisco, así como datos y contenidos que emanan de los documentos oficiales de Naciones Unidas sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenibles vinculados con la Agenda 2030.  

CEU Andalucía contra el hambre   

Desde hace más de 40 años, CEU Andalucía colabora con la Campaña contra el Hambre de Manos Unidas. Manos Unidas, la ONG de desarrollo de la Iglesia Católica y de voluntarios que trabaja en el apoyo a los pueblos del Sur en su desarrollo, así como en la sensibilización de la población española. Desde hace ocho años, en el Colegio CEU San Pablo Sevilla se viene colaborando económicamente, aportando recursos para los proyectos de Manos Unidas. También otros centros de CEU Andalucía, como Cardenal Spínola contribuye desde hace años. Esta institución, con sus proyectos, lucha contra el hambre y promueve el desarrollo humano integral de todas las personas. En este 2020, plantea Manos Unidas que es el momento de luchar por un planeta sostenible y contra la pobreza y de fomentar el cuidado del medio ambiente, nuestra «casa común».  

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Recogida de alimentos  

Cada año, todos los centros de CEU Andalucía colaboran en diversas campañas de recogidas de alimentos, sobre todo en Navidad, que se ponen a disposición de diversas Cáritas Parroquiales. Igualmente, se colabora anualmente en la gran recogida de alimentos anual del Banco de Alimentos de Sevilla. 

Diversas iniciativas se ponen de relieve en relación a las tareas y proyectos desarrollados de los centros de CEU Andalucía: Colegio CEU San Pablo Sevilla, Centro de Estudios Profesionales, Centro de Estudios Universitarios Cardenal Spínola CEU e Instituto de Posgrado-Executive Education. Con ello, se muestran los proyectos personales o colaborativos más significativos de algunos de los miembros de nuestra Comunidad Educativa a favor de los ODS, formada por más de 4.200 personas, entre alumnos, profesores y personal de administración y servicios.  

El Papa Francisco, una palabra de vida  

El Papa Francisco manifestó, respecto a la realidad del hambre en el mundo -ante la Asamblea de la FAO (Roma, 27 de junio de 2019)-, que “hay que erradicar con mayor rapidez y con fuerza los complejos, graves e inaceptables flagelos del hambre y de la inseguridad alimentaria”. Respecto al objetivo “Hambre Cero” en el mundo, destaca el Papa que “es todavía un gran desafío, aun cuando se debe reconocer que en los últimos decenios se ha visto un gran avance. Para combatir la falta de alimento y de acceso al agua potable, es necesario actuar sobre las causas que las provocan. En el origen de este drama se halla sobre todo la falta de compasión, el desinterés de muchos y una escasa voluntad social y política a la hora de responder a las obligaciones internacionales. 

El Papa habla también de la necesidad de reducir el derroche de alimentos y de agua, para ello, “la educación y la sensibilización social es una inversión tanto a corto como a largo plazo; pues las nuevas generaciones pasarán este testigo a las futuras, sabiendo que este drama social no puede ser tolerado por más tiempo. Está también puesto de relieve por el Papa la evidente conexión entre “fragilidad ambiental, la inseguridad alimentaria y los movimientos migratorios”. Él estima que esto solo se logrará por dos vías: en primer lugar, invirtiendo y desarrollando tecnologías y, en segundo lugar, ideando políticas innovadoras y solidarias para el desarrollo. 

Hambre cero y seguridad alimentaria 

Para eliminar el hambre en el mundo son esenciales el sector alimentario y el sector agrícola. Por ello, se hace necesario gestionar de forma eficiente y sostenible, la agricultura, la silvicultura y la acuicultura, que contribuirán a generar una adecuada alimentación para todos los pueblos de la tierra. La sobreexplotación del planeta es fuente de pobreza y degradación. Junto al cambio climático, esta sobreexplotación desata desastres naturales que -en primera persona- sufren las poblaciones agrarias y sus entornos, lo que les obliga a desarraigarse de su tierra y tener que emigrar para poder seguir viviendo. Para evitar todo esto, habrá que promover sistemas de producción alimentaria sostenibles 

Todavía hoy una de cada nueve personas de nuestro mundo -que suelen vivir en países en vías de desarrollo, sobre todo en Asía del Sur y en el África subsahariana-, está subalimentada. Estos son más de ochocientos millones. Casi la mitad de los niños menores de 5 años que mueren es por mal nutrición.  Uno de cada tres niños tienen retrasos en el crecimiento por una pobre alimentación.  

El sector de la agricultura constituye la mayor fuente de ingresos y empleos para hogares rurales pobres, un 40% de la población mundial actual. Más de 500 millones de pequeñas granjas en todo el mundo, proporcionan el 80 por ciento de los alimentos que se consumen en gran parte del mundo en desarrollo. Por tanto, invertir en pequeños agricultores ayuda a aumentar la seguridad alimentaria y la nutrición para los más pobres, así como la producción de alimentos para los mercados locales y mundiales. Más de 4 mil millones de personas no tienen acceso a la electricidad en todo el mundo, la mayoría de las cuales vive en áreas rurales de los países en desarrollo. La pobreza energética en muchas regiones es una barrera fundamental para reducir el hambre y asegurar que el mundo pueda producir suficiente alimento para satisfacer la demanda futura.  

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¿Qué objetivos se plantean para el año 2030 para erradicar el hambre y la seguridad alimentaria? 

El principal objetivo es poner fin al hambre y asegurar el acceso de todos, en especial a los más pobres a una alimentación sana, nutritiva y suficiente durante todo el año. Se conseguirá mediante dos vías: acabando con la malnutrición, especialmente de los niños menores de 5 años, y abordandoecesidades de nutrición de las adolescentes, las mujeres embarazadas y lactantes y las personas de edad 

Duplicar la productividad agrícola y los ingresos de los productores de alimentos en pequeña escala, pastores y pescadores es otros de los objetivos, en particular las mujeres, los pueblos indígenas, los agricultores familiares, los pastores y los pescadores. Las vías para conseguirlo son: asegurar la sostenibilidad de los sistemas de producción de alimentos y aplicando prácticas agrícolas resilientes que aumenten la productividad y la producción; contribuir al mantenimiento de los ecosistemas; y fortalecer la capacidad de adaptación al cambio climático, los fenómenos meteorológicos extremos, las sequías, las inundaciones y otros desastres, mejorando progresivamente la calidad del suelo y la tierra 

También es importante mantener la diversidad genética de las semillas, las plantas cultivadas y los animales de granja y domesticados y sus especies silvestres conexas, entre otras cosas mediante una buena gestión y diversificación de los bancos de semillas y plantas a nivel nacional, regional e internacional. Asimismo, es necesario promover el acceso a los beneficios que se deriven de la utilización de los recursos genéticos y los conocimientos tradicionales y su distribución justa y equitativa, como se ha convenido internacionalmente.   

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Con estas iniciativas y propuestas trabajadas trasversalmente, la Fundación San Pablo CEU Andalucía se convierte en una institución sostenible que contribuye a conseguir los objetivos de la Agenda 2030 con su apuesta por una comunidad CEU más respetuosa con el medio ambiente y al servicio del hombre y de toda la sociedad.